El Libro Verde del Envejecimiento es un informe sobre el impacto del cambio demográfico en Europa. Ha sido elaborado por la Comisión Europea, que se hace eco así de las repercusiones de este hecho a largo plazo. El volumen de mayores crece en todo el mundo, pero es este continente el que experimenta la progresión en un mayor grado. La intensidad del cambio es asombrosa. Desde la década de los 70, tanto en hombres como en mujeres, la esperanza de vida se ha elevado alrededor de los diez años. La edad media de la población es de 42,5 años, lo que supone más del doble que en África. Y la tendencia seguirá en aumento en las próximas décadas.
Los efectos de este escenario son de un gran alcance. El devenir de la economía, la sanidad o el bienestar social son, entre otros, factores que dependerán del modo en que se afronte la situación. Y es que el envejecimiento de la sociedad plantea enormes desafíos. Pese a ello, no se ha de contemplar desde un punto de vista negativo sin más. Según el informe, representa una fuente de oportunidades en cuanto a la creación de puestos de trabajo, el fomento de la economía plateada, la equidad y el crecimiento sostenible.
El coronavirus da paso al Libro Verde del Envejecimiento
La crisis causada por el SARS-CoV-2 ha puesto de relieve la vulnerabilidad del sistema a la hora de contener los daños. Y muchos de ellos se vinculan a la transformación demográfica. Por esta razón, el objetivo del informe es abrir un debate político sobre cómo afrontar el reto. Se trata de poner en común las mejores opciones a la hora de responder tanto al desafío que plantea el envejecimiento como a las nuevas oportunidades que brinda. Todo ello bajo el enfoque de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y el Decenio del Envejecimiento Saludable de las Naciones Unidas.
No hay duda de que son los estados miembros quienes han de hacer frente a los efectos del envejecimiento de la población. No obstante, la Unión Europea quiere señalar las cuestiones clave que encierra, así como prestar apoyo a las medidas que se adopten, bien sea a nivel nacional, regional o local. Es de desear que una iniciativa tan acertada llegue a buen puerto. Las personas mayores han sido el colectivo más castigado por la Covid-19, tanto en el número de muertes como en el de afectados. Y es urgente apuntalar unos derechos que, en lo que respecta a los mayores de hoy, han mostrado una extrema fragilidad. Ellos han sabido resistir la adversidad, pero se han de prevenir daños así en el futuro. En este enlace se puede ver el documento completo.
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